Las cocinas de las casas de hace 40 años no tienen nada que ver con las de ahora. El precio del metro cuadrado en las ciudades se ha disparado, y aunque los constructores son conscientes de las muchas horas que pasamos algunos en la cocina por pasión y por necesidad, las cocinas pequeñas son tendencia en los apartamentos de nueva construcción. Por eso, muchas veces no sabemos dónde colocar un microondas en una cocina pequeña, y mucho menos ya otros electrodomésticos como robots de cocina, licuadoras, mini hornos, etc.
Si tenemos una cocina pequeña, lo primero es dejar de un lado en la elección los microondas grandes. Tenemos microondas de 16 litros en adelante, por lo general. Pues bien, si podemos, mejor elegir un microondas de 18 litros, que uno de 25 litros, para que nos entiendas, pues cuando se trata de medir al milímetro, todo cuenta. Estaremos perdiendo capacidad interior en la máquina, pero es a lo que nos vemos obligados cuando el espacio no sobra en una cocina.
Eso, dando por hecho que si te estás preguntando dónde ubicar tu microondas nuevo, es porque no tienes un hueco específico en el diseño de tu cocina, y porque tampoco puedes sacarlo de uno de los cajones de tus muebles de cocina, pues, de lo contrario, lo más práctico es siempre optar por los microondas integrables.
Puede que no lo hayas pensado, pero en un armario del que podamos prescindir (ya sabemos que es mucho decir), quitando la puerta, podríamos encastrar nuestro microondas y tener incluso un plus de espacio para otras cosas. En ese caso, ten en cuenta que el microondas libera calor cuando está en marcha, y que aunque no necesita demasiado para «respirar», sí puede afectarle a los alimentos que coloquemos a su lado.
Sería una opción, pero es poco probable que puedas hacerlo si estás aquí leyendo esto. Tampoco creemos que sea demasiado probable que tu microondas tenga cabida en la encimera, pues es la primera opción, la más obvia. De todos modos, inténtalo, y puestos a elegir entre tener sobre la encimera pequeños electrodomésticos o cualquier cosa que pese poco, que no se use constantemente, y que se pueda guardar en otro sitio para sacarla en caso de necesidad, opta por colocar el microondas en la encimera, en su lugar.
Si tu cocina es pequeña, no tienes espacio en los muebles, la encimera no da para más, pero tienes espacio en una pared posterior o lateral, por ejemplo, considera la opción de usar un mueble supletorio para microondas, un mueble camarera, una repisa, etc. Hay muchas opciones incluso hay estantes para microondas que permiten jugar con las alturas sobre la propia encimera.
Ok, tenemos un microondas de tamaño medio en una cocina pequeña, no tenemos ningún hueco para encastrar el aparato, en nuestra encimera no tiene cabida un estante de dos alturas, y no tenemos espacio para un mueble supletorio. Más difícil todavía. En ese caso, si tienes un punto de luz en cualquier espacio libre de la pared de tu cocina (y si no lo tienes, cualquier electricista te lo podrá sacar), puedes colocar una balda simplemente y poner el microondas sobre ésta, siempre que no quede demasiado alto.
Si realmente no te cuadra ninguna de estas opciones, es porque tu cocina no da para tener un microondas. En ese caso, vamos a hacer un último intento preguntándote si tienes horno instalado en esa mini cocina. Si la respuesta es que sí, y aún no has comprado tu microondas, la opción más lógica sería comprar un horno combo con microondas, ahorrándote el espacio del microondas al hacer el horno las funciones de los dos.
Si ni con éstas das con la clave para colocar tu microondas en tu cocina mini, nos damos por vencidos, te dejamos claro que dentro del horno, dentro del frigorífico, en el lavadero, o colgado detrás de la puerta… ¡no es una buena idea! 🙂 Y ya puestos, te recomendamos también que leas el artículo sobre dónde colocar el robot de cocina, por si te sirviera para sacar alguna conclusión extra.
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