Es rara la casa o local de comidas en la que no hay un microondas en la cocina. Pero no todos sabemos qué son las microondas y cómo hacen funcionar el electrodoméstico que tanto y tan rápido nos ayuda en nuestro día a día.
En nuestro post vamos a intentar contarte todo lo que necesitas saber sobre el funcionamiento de este aparato, empezando por qué son las microondas hasta cuál es la razón por la que no se pueden introducir en él nada metálico.
✓ Qué son las microondas
¿Qué son las microondas?
Vamos empezar contándote lo que da nombre a este post , hablando desde la física.
No nos vamos a enrollar mucho, pues no somos físicos ni nada por el estilo. Además no queremos aburrirte con un lenguaje que no todos endemos.
Microondas son aquellas ondas electromagnéticas, de entre 300 MHz y 30 GHz, con un período de oscilación de 3 s a 33 s, y una longitud de onda que se mueve en el rango de 10 mm a 1 m… Lo dicho, algo muy poco entendible para la gran mayoría.
¿Qué ondas usa un horno microondas?
Dentro del rango anterior, hay unas ondas específicas que son las que hacen que nuestro microondas caliente la comida. Estas ondas electromagnéticas se mueven en torno a los 2450 MHz, lo que hace que la comida se caliente pero sin quemarse y sin perder sus propiedades.
¿Cómo calienta la comida un microondas?
Bueno, ya está bien de hablar de números y unidades de medida. Vamos a hablar un idioma más común y que te resultará muy curioso.
Una vez que tú metes la comida en el horno y le das a funcionar, las ondas comienzan a hacer su efecto. Lo que hacen es introducirse en el alimento calentando el agua que este contiene.
El agua, las grasas y alguna sustancia más que compone el alimento absorbe la energía que producen las ondas haciendo la magia de calentar la comida en un tiempo récord.
¿Por qué algunos materiales se calientan en exceso dentro del microondas?
Si introduces en el microondas elementos con baja conductividad térmica, como puede ser el vidrío, pueden llegar a calentarse en exceso. Hay algunas cerámicas que podrían, incluso, fundirse. A esto se le llama embalamiento térmico.
Para evitarlo, este tipo de materiales siempre deben meterse en el micro acompañado de algún tipo de líquido y es la razón por la que en los manuales de uso de estos pequeños electrodomésticos, siempre se indica que no se pueden meter en su interior recipientes vacíos ni metales. Pero de este último punto te hablaremos más abajo.
Precauciones en el uso del microondas
El microondas bien utilizado y con un buen mantenimiento (hay que tratar muy mal uno de estos aparatos para que den problemas) es un electrodoméstico seguro. Pero hay algunas precauciones que deberías tomar a la hora de usarlo o con los alimentos que vas a meter en su interior.
- Nunca calentar recipientes vacíos, por las razones explicadas anteriormente.
- No introducir recipientes o utensilios de metal.
- No cocer huevos enteros con cáscara, ni con la yema sin romper, pues podrían estallar.
- Al calentar agua durante mucho rato, si ves que no entra en ebullición, cuidado, pues podría superar los 100ºC pero no hacer burbujas, y al introducir en su interior una cuchara o cualquier otro elemento, el agua entrará peligrosamente en ebullición de forma agresiva y podrías quemarte.
- Si ves que tu microondas empieza a fallar, no te aconsejamos que intentes repararlo tú mismo. Lo mejor es que lo lleves a un especialista o podrías producir un corto circuito alguna o alguna fuga de ondas magnética que podría poner en riesgo tu salud.
¿Qué pasa si introduces algo de metal en el microondas?
Hemos comentado que la comida dentro del microondas se calienta al calentarse, entre otros componentes, el agua que está en su composición.
Es evidente que el metal no tiene nada de agua y es por ello que es de las cosas más peligrosas que puedes tener dentro de un microondas en funcionamiento.
La razón es que las ondas que genera el micro generan una corriente eléctrica en el metal que hace que salten chispas en la superficie del utensilio cuando este tiene punta.
En el caso de no tener punta, tal vez no veas chispas, pero las ondas rebotarán en el metal y pueden incluso llegar a quemar el corazón mismo del aparato, estropearlo o hacer que salga ardiendo.
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